powered by Coinlib

La guerra de los tulipanes.

jueves, 8 de febrero de 2018


O de como las abejas se impondrán.

No existen verdades ni mentiras absolutas, las purezas 100% vírgenes, solo son creadas por algunas de nuestras mentes, la maldad o la bondad no la vas a encontrar impolutas en ningún lado, nuestra propia naturaleza nos empuja hacia los matices grises o hacia las paletas de colores, y allí es donde realmente escogemos hacia que parte nos sentimos identificados y cómodos, empezamos a encontrar nuestra propia naturaleza.

Hagan memoria, no tan larga, es más, muy corta: “se derrumbó el Bitcoin”, “la burbuja exploto”, “se acabó la fiebre”, “caída libre de las criptomonedas”, “el desplome es total, adiós”, estos titulares y otros, un tanto más escandalosos, de “medios especializados”, de algunos que ni idea tienen sobre estos temas, y con fama de “serios”,  se vienen repitiendo desde hace un buen tiempo, han matado, acabado, sepultado y despedido a las criptomonedas infinidad  de veces, lo malo ni siquiera es el juego perverso de la manipulación y la desinformación, que ya de por si es muy pésima señal, de la supuesta objetividad periodística que tanto pregonan y se jactan, lo peor, es que no tienen escrúpulos para repetir una y otra vez la misma historia, le cambian las fechas y los gráficos, aumentan los rojos de sus escritos y listo, anuncian nuevamente el fin de esta nueva era, ya en estos pocos años de nacimiento del mercado de cryptos, hemos presenciado varios colapsos definitivos, de acuerdo a estos medios.

Y por supuesto que cada quien puede y está en su total y respetado derecho, de tener la posición que mejor le agrade o le convenza sobre las criptomonedas, los que impulsamos con fuerza su adopción y la de la tecnología de las cadenas de bloques, defendemos como premisa fundamental, precisamente los temas de democratización, código abierto y descentralización,  el asunto es que una cosa es el sano, y normal debate donde cada persona manifiesta sus ideas y otra muy diferente, es la continua y grosera manipulación informativa, que algunos insisten en utilizar de manera insistente y permanente, no quiero pecar de ingenuo, por supuesto que conocemos los hilos de los intereses que se mueven alrededor, solo lo traigo a colación para que en esta guerra de tulipanes nadie caiga por inocente o porque no sabía lo que pasaba, recuerden que a pesar del dicho, guerra avisada si mata soldados, sobre todo, si al final y con todos los peligros insisten en ir a ella.

Si nos tomamos un tiempo para ver cómo marcha la evolución tecnológica de la humanidad en los últimos 100 años, digamos desde el 1918 hasta hoy, verán como, sin conflictos bélicos mundiales ni participación masiva de personas, hemos avanzado exponencialmente los recientes 40 años de manera increíble, lo que normalmente dábamos por sentado como algo que duraría mucho tiempo, hoy su vida útil apenas sobrepasa un año, y no porque la tecnología que lo creo no sirva, no, sucede porque sobre ella o a los lados, se desarrolló una nueva, que simplemente lo desplazo, y vamos a entenderlo, nuestras percepciones, mapas y suiches mentales en lo absoluto están preparados para tamaño salto, que ya no damos en décadas, ni años, sino en horas y meses, acostumbrados a sopesar, reflexionar y verificar las cosas con un margen relativamente cómodo, ahora tenemos un mercado que no duerme, no deja de producir nunca, no descansa y no da respiro, la disrupción de nuestras mentes solo es el principio de una realidad que va a cambiar radicalmente todas nuestras relaciones como individuos y sociedad, hoy más que nunca las abejas tienen la certeza de imponerse, aunque, clarísimo que no será fácil ni sencillo.

El río subterráneo de la micro economía, por vez primera, tiene la alternativa de interconectarse, de manera directa, descentralizada, sin intermediarios, de forma eficaz y eficiente a nivel mundial, puede establecer relaciones profundas, negociar bienes, activos y servicios, puede obtener financiamiento y otorgarlo, está en capacidad de generar un valor agregado, impensable hace apenas unos 8 años atrás, el tiempo lineal, como hemos tratado desde nuestras líneas, ha abierto el paso a un modelo que procura abrirse su propio camino y que irremediablemente sustituirá al estado actual de las cosas como las conocemos, el futuro ya está entre nosotros, la gran mayoría no lo ve, ni lo siente, pero eso no define su existencia, solo se le hace esquiva a muchos.

El Blockchain y las criptomonedas incluso están evolucionando todos los días, estamos apenas en su etapa de crecimiento temprana y ya se empiezan a producir intensos cambios que nacen de su propio interior, su ecosistema de descentralización distribuida, genera sus propias herramientas para concebir modificaciones y nuevos descubrimientos, que nos hagan avanzar un paso más allá, siempre hemos visto como las cosas funcionan aparentemente sencillas: un carro, la electricidad, la internet, la mayoría lo asume como natural y transparente, no se preocupa cómo es que marcha, ni mucho menos como hemos llegado hasta aquí.

El mercado de intercambios de las cryptos es un importante engranaje del sistema, pero no es el único, quienes quieran dedicarse a la especulación financiera, tendrán que tener aguante y nervios para lidiar una novel bolsa, que tiene muy poca historia, los embates están en etapa temprana y ahora es que queda tela por cortar en esta criptoindustria, su consolidación está íntimamente ligada con la fortaleza de sus proyectos y del uso masivo de sus aplicaciones, pero no de una en particular, ni de una crypto en específico, sino de muchas que resolverán temas micro, que como colmena, distribuida relaciones a toda la comunidad, es un movimiento complejo donde cada uno de los factores cumple un rol y un momento.

Así las cosas, les ratifico que vamos a tener un año 2018 inolvidable y espectacular, los dolores del crecimiento se van a acentuar a ritmos de caos, las subidas y bajadas dejaran sin aliento a más de uno, y mientras tanto, aguas abajo, el enjambre va continuar colocando las ¿¡viejas!? y las nuevas cadenas de bloques dentro del proyecto mayor y hacia allá, seguro, avanzaremos sin pausa, al compás del código abierto del Blockchain.        
 
Copyright © 2016. La Ciencia del Bolsillo.
Design by Herdiansyah Hamzah. & Distributed by Free Blogger Templates
Creative Commons License